Con la casa en la palma de la mano

Periódico El Tiempo (Bogotá, Colombia) Febrero 15 de 2008

Automatizar las funciones básicas, con equipos instalados que se pueden actualizar en el futuro, es el nuevo valor agregado que ofrecen los constructores.

Así como al comprar un carro se pueden pedir accesorios como el aire acondicionado o bloqueo central "de fábrica", ahora es posible 'engallar' la casa desde la compra en planos.

Así, los gomosos de la tecnología encontraron en los constructores los mejores cómplices para automatizar el hogar, sin tener que acudir a un maestro de obra que perfore, arregle y pinte las paredes que acaban de ser levantadas."

La tecnología hace las labores diarias más sencillas y es mucho más económico ponerla durante la construcción del edificio que cuando el apartamento está totalmente terminado", explica Hernán Castro, gerente de Technoimport."

También es una estrategia para darle un valor agregado a los inmuebles y una opción flexible para equipar el hogar a quienes así lo deseen, sin importar en qué estrato esté el bien", explica Bibiana Loboguerrero, gerente de mercadeo de la constructora Marval, que ya está equipando todas las 50 salas de ventas que tiene a lo largo de todo el país.

Los proyectos cubren grupos socioeconómicos desde la VIS hasta los proyectos más exclusivos en las capitales principales."La idea es que el comprador y toda la familia puedan ver cómo funciona cada aparato y equipo, para qué sirve, dónde se podría instalar, qué tanta utilidad presta y si vale la pena frente a la inversión", añade Loboguerrero.

Uno de los módulos más buscados es el de sonido, que agrupa los 5 ó 7 parlantes del teatro casero, controladores de volumen para cada habitación, estudio, cocina, terraza o los ambientes elegidos; y los equipos necesarios para reproducir DVD, radio, IPod y otros auxiliares desde cualquier lugar de la casa.Es más, casa persona puede escuchar o ver lo que desee, de forma independiente, en su espacio. Tal vez es el más buscado porque es el que más cableado y, por ende, obra civil requiere; solamente empotrar los parlantes ya representa gastos en materiales y mano de obra.

Precisamente, los constructores le han apostado a entregar la casa dotada porque la tecnología tiene un estado de madurez tal que pueden garantizar, incluso de por vida, tanto la instalación como los equipos.

De hecho, para actualizarlos basta con renovar el sistema operativo como se hace con las nuevas versiones de Windows o con cambiar las tapas de los controles si ya no se ajusta a la decoración."Los controles manuales -que se fijan a la entrada del apartamento- son inalámbricos y permiten prender o apagar total o parcialmente las luces y el sonido, sin tener que recorrer cada habitación para asegurarse de que todo quede en orden", añade Castro.

El segundo lugar lo tiene la seguridad, con alarmas autónomas que se disparan y reportan a la portería y al celular del propietario cuando hay intrusos, fugas de gas, humo, inundaciones o algún movimiento cuando el hogar debería estar vacío."La ventaja es que ya no se requiere un computador exclusivo para el monitoreo pues con la conexión a internet que va a una sim card -de un celular normal- se hace la llamada al celular del propietario para que este se conecte a la web y mire quién llegó a su hogar."Incluso, teniendo un teléfono de última tecnología se podrá ver el video en tiempo real de qué está pasando en casa. Sólo se requiere conexión de banda ancha", agrega Castro.

En el momento en que se dispara la alarma, se bloquean las puertas, se encienden todas las luces (para visualizar al malhechor rápidamente) y se levantan todas las cortinas.En cuanto a iluminación, desde el control incrustado en la pared (o el remoto) se gradúa la intensidad de la luz o se atenúa y se enciende el motor que, sin ningún ruido, eleva o baja el blackout y las cortinas.De hecho, para la época de vacaciones o ausencias largas de la familia se puede programar el encendido de las luces y la música y la apertura de cortinas en diferentes momentos del día para 'despistar al enemigo'.

Así, el comprador elige -dependiendo de su presupuesto y sus gustos- con qué módulos 'engalla' su casa.

¿Cuánto vale dotar el hogar?

Los constructores le apostaron a ofrecer cuatro módulos que se adaptan al presupuesto y, de paso, permiten complementar las soluciones tecnológicas en la medida en que el comprador así lo quiera y pagarlo con el crédito o durante la construcción de la obra.

Aunque todo depende del estrato, los módulos se crearon de acuerdo a las condiciones físicas con que cuenta cada unidad privada. Para el estrato más alto, en Bogotá, que es el más exigente en cuanto a acabados y compatibilidad con diferentes equipos y accesorios, controlar el sonido, la iluminación y la cámara de seguridad y tener parlantes y puntos de conexión instalados vale unos 12,5 millones de pesos.

INGRID M. MORAECONOMÍA Y NEGOCIOS