Aunque lo mejor nos parece que es tener el disco duro integrado de forma natural en el televisor, con posibilidad eso sí de sacarlo y meterlo en caliente, Sony de momento ha optado por ofrecer un módulo que se puede añadir a sus televisores Bravia para dotarlos de la función de grabador digital de medios.
El Sony BRX-A320 DVR es una caja de poco diseño y nada atractiva que lleva dentro un disco duro de 320 GB, un número que se antoja a todas luces como pequeño si le queremos dar un verdadero uso. Ya que se trata de una unidad externa en el que el diseño ha sido lo de menos, Sony podría haber aprovechado para ofrecer una capacidad de verdad o el cambio del mismo por parte del usuario. Con esa capacidad, en total nos daría para unas 27 horas de vídeo en alta definición y 55 con resolución estándar, pero seguro que esta segunda no la escoje nadie. Al menos nadie que quiera aprovechar las posibilidades de su televisor.
El Sony BRX-A320 DVR se conecta al televisor con un cable HDMI y para disimular un poco, podemos colocarlo por la parte trasera del televisor mediante un sistema de montaje que se vende separado.
Este grabador lleva su propio sintonizador de televisión digital, y viene con mando a distancia. Se pone a la venta en Japón al escandaloso precio de 550 dólares. Poco éxito le auguramos.
El Sony BRX-A320 DVR es una caja de poco diseño y nada atractiva que lleva dentro un disco duro de 320 GB, un número que se antoja a todas luces como pequeño si le queremos dar un verdadero uso. Ya que se trata de una unidad externa en el que el diseño ha sido lo de menos, Sony podría haber aprovechado para ofrecer una capacidad de verdad o el cambio del mismo por parte del usuario. Con esa capacidad, en total nos daría para unas 27 horas de vídeo en alta definición y 55 con resolución estándar, pero seguro que esta segunda no la escoje nadie. Al menos nadie que quiera aprovechar las posibilidades de su televisor.
El Sony BRX-A320 DVR se conecta al televisor con un cable HDMI y para disimular un poco, podemos colocarlo por la parte trasera del televisor mediante un sistema de montaje que se vende separado.
Este grabador lleva su propio sintonizador de televisión digital, y viene con mando a distancia. Se pone a la venta en Japón al escandaloso precio de 550 dólares. Poco éxito le auguramos.
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